Interpretación de sueños en Grecia y Roma
En Grecia y Roma, los intérpretes de sueños eran llevados a las batallas para acompañar a los líderes militares, con el fin de traducir los mensajes de los dioses.
En estas civilizaciones, los sueños se consideraban comunicaciones de los dioses. Incluso, Cicerón, Sócrates, Aristóteles y Sófocles creyeron en su capacidad reveladora.
También Hipócrates, uno de los fundadores de la medicina científica, creía que los sueños ejercían una gran influencia sobre la salud y los utilizaba como diagnóstico de las enfermedades. Fue precisamente por motivos medicinales que en Grecia se originó la incubación de los sueños. Para ello, se rendía culto a Asclepio, dios del arte de la curación, en grandes santuarios como el de Epidauro, que contaba con 150 camas, parque y baños públicos. Allí las personas podían dormir hasta que Asclepio les enviara en sueños el remedio a sus enfermedades.
Griegos y Romanos soñaban para predecir el futuro.
Los griegos también utilizaban los sueños con el fin de conocer el futuro. En el oráculo de Anfiarao, se hacía dormir a las personas, a través de diferentes métodos, y se las programaba para que tuvieran sueños sobre el futuro.
Para ello, utilizaban una técnica singular: debían sacrificar un carnero en el gran altar y seguir un ayuno riguroso. Los días anteriores no se podía comer carne de cerdo ni de algunos pescados, cebollas, judías o ajo; tampoco, tomar alcohol.
Siguiendo la tradición helénica, los habitantes de la antigua Roma sentían una profunda fascinación por la interpretación de los sueños, ya que consideraban que podía predecir el futuro.
Un ejemplo de este interés lo constituía el hecho de permitir a cualquier persona presentar en el Senado un sueño que considerase importante para el destino de la patria. Los senadores discutían largamente al respecto, tomaban decisiones y acciones concretas incluyendo, si el caso lo requería, el otorgamiento de subvenciones.
Califica este Artículo
Categoría: Interpretación de los Sueños.
Deja una respuesta