Procedimiento para interpretar sueños


Al despertar

Piénseselo bien antes de desechar un sueño por considerarlo estúpido o porque le ha llegado en fragmentos. Échese de nuevo un poco más y trate de recordar los detalles, pues a veces, al despertar y reflexionar sobre el sueño desde la fase al-beta, si se formula la pregunta correcta, puede que se reciba tanto una interpretación del sueño como una impresión muy fuerte que le ayudará a comprender mejor su sentido oculto. Pruébelo.

Escribir

Anote en su libro de sueños —y con la máxima precisión posible— todo lo que recuerde de él y, por favor, ¡no lo haga en el primer trozo de papel que encuentre! Tiene que habituarse a manejar los sueños como si de valiosos docu­mentos se tratara. Si no dispone del tiempo necesario para escribir todo lo que querría, es aconsejable que relea las secciones del capitulo anterior «Gra­bar el sueño» y «Soñar en fin de semana».

Procedimiento para interpretar sueños Interpretación de los Sueños

Sensaciones

Una vez que haya acabado de anotar el sueño, acostúmbrese a dejar tam­bién por escrito las sensaciones que le produjo: felicidad, alegría, tristeza, gozo, inquietud, frustración, determinación, miedo o cualquier emoción o estado de humor en que se encontrara al despertar.Tómese todo el tiempo que necesite para aclarar sus sensaciones; precíselas lo máximo posible (por ejemplo, «muy decepcionado», «medianamente frustrado» o «extrema­damente feliz»).

También debe anotar de qué tipo de sueño cree usted que se trata: PES (percepción extrasensorial), lúcido, visión, pesadilla, simbólico, supercons­ciente o de cualquier otro tipo.

Símbolos principales

Este apartado es especialmente importante para todas aquellas personas que, antes de empezar la jornada, no disponen del tiempo necesario para analizar con detalle los sueños. Los que consideren que les sucede esto tienen que escoger un símbolo destacado del sueño y tratar de averiguar qué significa.

Acción del sueño o tema central

Examine su sueño, a ser posible con un bolígrafo de un color llamativo o con un rotulador fluorescente; subraye los verbos: esto le permitirá hacerse con rapidez una idea general de la acción principal del sueño.Trate de resu­mirla en una breve frase del tipo: «Alguien está comprándose ropa», «Hay alguien subiendo una escalera» o «En el sueño aparece una persona jugan­do».Así es como hallará el tema fundamental del sueño.

Con frecuencia se encontrará con varios temas menores dentro de un mismo sueño, de forma que en la aventura onírica aparece una persona que corre, otra que esconde algo, otra que juega a algo indeterminado e incluso una última que se dedica a mirar con atención. No se entretenga demasiado: se trata sólo de hacerse una idea rápida del argumento general del sueño antes de pasar al análisis pormenorizado de los símbolos; lo que con ello se pretende es que tenga una visión más amplia de todo el conjunto. (Puede hallarse información más detallada acerca de sueños con múltiples temas en Further Exploration of Dreams.)

Escenario

¿Dónde se desarrollan los sucesos oníricos? ¿Es en un lugar interior o al aire libre? ¿Le recuerda su casa o algún lugar relacionado con su familia? ¿O quizá con su trabajo? ¿Tiene algo que ver con la salud? ¿Está oscuro o hay luz? ¿Qué edificios aparecen? ¿Son conocidos de hace tiempo y familiares para usted, o más bien los acaba de conocer hace poco? ¿Qué sensación le produce el escenario en general? ¿Le inspira confianza y seguridad, o intranquilidad?

Todas estas preguntas pueden ayudarle a comprender a qué parte en con­creto de su vida quiere darle más énfasis el sueño: sus sensaciones deben confirmarlo. De no ser así, estará usted obligado a comprobar con más deta­lle de qué escenarios se trata. Cuando haya averiguado cuál es la acción prin­cipal y a qué aspecto de su vida se refiere, habrá dado ya un paso decisivo de cara a descubrir el objetivo del sueño; entonces estará verdaderamente pre­parado para adentrarse en los detalles.

Haga un boceto de los símbolos especiales

Tanto si se considera un manitas del dibujo como si no, es muy recomenda­ble que intente realizar un sencillo boceto, un pequeño dibujo, aunque sean unos garabatos o una caricatura, de tantos símbolos oníricos como le sea posible. La razón es muy sencilla: ésta es la mejor manera de encontrar el sentido oculto del símbolo de un sueño. Si ello le supone demasiado esfuer­zo o requiere más tiempo del que usted puede dedicar a ello, intente dibujar al menos los símbolos menos habituales, sobre todo los que le resultan más difíciles de describir con palabras. Esto nos ayudará a no olvidarlos, pues no es raro que el sentido simbólico que encierran se nos aparezca con toda cla­ridad días —e incluso meses— después; si esto sucede, verá la enorme alegría que siente al ir de nuevo a los bocetos que realizó en su día y que ahora le resultan tan útiles para comparar con sus averiguaciones más recientes.

Palabras clave

Vuelva a repasar lo que escribió sobre el sueño una vez más; subraye las pala­bras, oraciones, retruécanos y frases hechas más importantes. Debajo del sueño que ha anotado, confeccione una lista con las palabras clave como si de una muestra se tratase, dejando entre ellas espacio suficiente para poder anotar los comentarios, sensaciones y significados que le sugieran; empiece siempre por la más sencilla y clara. No olvide nunca que sus sueños no son más que escenificaciones de sus propias actitudes y emociones destinadas a indicarle determinados hábitos de comportamiento, darle las respuestas que usted está buscando o, sencillamente, verter luz sobre alguna área de su vida que requiere un determinado cambio.

Busque las expresiones coloquiales, los juegos de palabras y los retrué­canos; sobre todo, esté muy atento a los vocablos o símbolos que se repi­ten dentro de un mismo sueño o que aparecen varias veces en una serie de sueños. Puede que llegue a encontrar símbolos diferentes que aludan a un mismo significado, y eso en un solo sueño. Sin duda, estas repeticiones quie­ren subrayar la importancia de un determinado asunto, lo cual hará que se sien­ta seguro de que va a lograr descifrar el enigma, ¡claro que sí! Si tiene orde­nador en casa, no dude en usarlo, pues facilita mucho el trabajo de interpretación, sin olvidar que, al acabar, tendrá un documento limpio y per­fectamente impreso.

Entreténgase tanto tiempo como sea necesario en anotarantes de con­sultar cualquier libro especializado— lo que significa para usted cada palabra o frase, pues son sus sensaciones, emociones, recuerdos y respuestas los que encierran dentro de sí los símbolos oníricos: de ahí que el significado verda­deramente importante es el que ellos tengan para usted, el único correcto.

Pongamos un ejemplo: el perro. Para la mayoría de la gente, los perros simbolizan la fidelidad, la amistad, la devoción y la protección. ¡Muchos pe­rros llegan a ser una parte muy importante de la familia! Pero no sentirá lo mismo quien haya sido mordido por uno o haya tenido cualquier experiencia desagradable por culpa de ellos: esa persona los asociará con el miedo, el dolor y la desconfianza. Hay personas para quienes los perros son la cosa más pesada del mundo, animales estúpidos que se pasan toda la noche ladran­do o que se dedican a hurgar entre la basura y los restos de animales muer­tos. En el fondo, toda interpretación es válida para la persona que la ha ela­borado.

Como todos los símbolos son potencialmente duales en cuanto a su sen­tido, lo más importante es que usted se muestre completamente sincero con­sigo mismo a la hora de decidir qué significa el símbolo para usted.

Al descubrir cuál es el significado real de un determinado símbolo, se suele experimentar una sensación agradable, un ligero escalofrío, como si dijéra­mos mentalmente «¡Ajá!», signo inequívoco de que lo hemos interpretado correctamente.

Si después de haber estudiado el símbolo con detenimiento no está segu­ro de saber con certeza qué significa, guíese por su intuición: escriba sin pen­sarlo todo lo que se le ocurra que puede significar; le sorprenderá compro­bar lo certeras que pueden llegar a ser nuestras intuiciones. Pregúntese: «¡Qué sensaciones me provoca este símbolo? ¡Qué recuerdos trae a mi memoria? ¡Qué asociaciones suscita en mi mente? ¡Cómo reaccioné yo ante el sueño?».Tenga siempre presente que trata de su situación actual, de sus sentimientos y del punto de vista que usted tiene en este momento acerca de la realidad.

Palabras habladas. En los sueños, la mayoría de contactos que se estable­cen son telepáticos. Se suelen decir pocas palabras —por no decir ninguna—. Es por ello que las afirmaciones suyas o de cualquier otra persona en un sueño son cruciales: con mucha frecuencia se trata de la auténtica clave del sue­ño. Por lo general, cualquier cosa que usted comente en el sueño en voz alta es de máxima relevancia, algo que usted, en el fondo, se está diciendo a usted mismo; así que debe prestarle toda la atención del mundo.

A veces sucede que el primer comentario es su respuesta a algún aspecto, circunstancia o situación de su vida: la respuesta que usted da constituye lo que verdaderamente piensa acerca de ese aspecto.

Timbres que suenan. En el sueño tiene por cometido llamar su atención sobre lo que se está dicien­do o lo que se va a hacer inmediatamente. No es más que una forma de recalcar la importancia de esa parte concreta del sueño; por ello es por lo que debe estar muy atento a lo que vaya a pasar de inmediato.

Las personas que aparecen en sus sueños. Desde un punto de vista general, toda persona, animal o cosa que tome parte en uno de sus sueños simboliza algún aspecto de usted mismo: puede tratarse de la parte más varia­ble de su carácter, del comediante que lleva dentro, de la figura paterna o de su propia naturaleza animal.Al mismo tiempo, la acción que realiza le mues­tra cómo actúa y se relaciona usted con cada uno de estos fragmentos de usted mismo. (Nuestra respuesta a estos símbolos representados por seres vivos suele ser negar la parte menos amable de nosotros mismos o, al menos, renegar de ella.) Anote cualquier conflicto que se suscite e intente, a su vez, mentalizarse de que todo lo que le está diciendo el sueño es decisivo para usted.

Significado

Una vez que haya acabado el análisis de los símbolos y de las palabras clave, se halla ya en disposición de decidir qué trata de decirle el sueño.Antes de seguir adelante, considere los tres elementos principales que componen un sueño:

Examínelos detenidamente; averigüe en qué punto se adecuan a su pregunta onírica, a su problema actual o a su estilo de vida presente, y de qué forma. Para comprender mejor de qué trata el sueño, puede ayudarse de la pregun­ta de su sueño o de su diario. Si es necesario, repase el sentido que le atri­buye al escenario general del sueño por si hay todavía claves ocultas o algo que se le haya pasado por alto.

Habrá días en que los símbolos encajarán con facilidad en la hipótesis que usted formula y en que el significado no tarda en hacerse claro, pero también puede suceder que haya alguna palabra o frase importante que se le resista. En casos así, no se precipite: analice detenidamente el posible significado, tómese para ello todo el día si fuera necesario; se trata de que ese mismo día alcance alguna conclusión acertada sobre el sueño. Consulte los posibles sig­nificados que este mismo libro le ofrece y, en el caso de que uno le parezca el correcto, utilícelo; si no es así, continúe la búsqueda, pues seguro que el signi­ficado que se le resiste le está esperando en algún lugar. Sólo usted puede interpretar correctamente sus sueños, así que confíe en usted mismo.

Una vez que se haya dedicado concienzudamente a analizar la acción, el es­cenario general, la gente, las palabras clave y los posibles objetivos que el sueño alberga, será necesario que redacte qué cree usted que quiere transmitirle el sueño. SI no está seguro de ello, gulas* por la Intuición: se trata sólo de que escriba una afirmación general acerca del significado más acerta­do que tiene para usted el sueño.

Resumen

Después de escribir el significado del sueño —algo que siempre es de gran ayuda para aclarar nuestra manera de pensar—, es aconsejable finalizar la tarea con un breve resumen —puede ser una simple frase afirmativa— para consul­tar a lo largo de nuestras reflexiones del mes. Este resumen nos servirá tam­bién como pozo de ideas para nuestras meditaciones personales.

Título

Si ya ha alcanzado el sentido del sueño, será fantástico darle un buen título, como si de una película se tratase. El título le ayudará a recordar mejor todo el sueño en general y le ofrecerá un punto en el que agarrarse en la inter­pretación o sobre el que meditar en futuras investigaciones.

Tomar una decisión

Sirve de muy poco descubrir el mensaje que encierra un sueño si no lo vamos a utilizar para nada. Los sueños son un sistema muy importante de autoayuda destinado a inspirar, iluminar y enriquecer su vida; pero si no aplica los cono­cimientos que revelan, perderán toda su fuerza. Cuando trabaje sobre sus sueños, pregúntese cómo va a utilizar las revelaciones que le brinda el sueño. Piénselo detenidamente, no lo deje de lado; tome finalmente una decisión al respecto y escríbala.

Aplicación

El siguiente paso consiste en aplicar lo que ha aprendido. Puede que en este punto del proceso necesite nuevos objetivos o afirmaciones sobre cómo va a enfocar las cosas de ahora en adelante, o quizá una nueva lista de posibles proyectos de futuro, que puede anotar en una agenda como «Cosas que tengo que hacer».

Seguir adelante

Hágase la firme promesa de no abandonar, de seguir adelante hasta el final; anote los pasos que considere necesario dar para llevar a cabo esta idea.

RETOQUES FINALES:

A primera vista, todo esto parece una tarea muy ardua, pero es de una utili­dad tremenda: nos aportará mucha información y, gracias a su amplio radio de acción, obrará importantes transformaciones en usted; no deje de repe­tirse que ejecutar todo este proceso merece todo el tiempo y esfuerzo que dedique a ello. Sea generoso con usted mismo y, sobre todo, quiérase; pues si no es capaz de quererse a usted mismo, será incapaz de querer a los demás… ¡y de lo único de que se trata en el fondo es de amar!

Si adopta esta rutina, estará usando un método que yo utilizo desde hace mucho tiempo y cuya eficacia me la asegura los muchos años de aplicación del mismo: se trata, sin duda, del mejor sistema y del más sencillo que yo haya descubierto hasta hoy para trabajar sobre los propios sueños; mi conse­jo es que lo utilice con seriedad y precisión antes de empezar a introducir algún cambio en él. Sólo cuando su sistema general de funcionamiento se torne ya un hábito para usted, será cuando pueda estar seguro de no dejarse ningún elemento esencial para el análisis e interpretación de sus valiosos sueños.

Cuando haya trabajado seriamente sobre unos pocos sueños, se familiari­zará de verdad con esta necesaria rutina: a partir de ahí, lo único que se nece­sita es algo que le recuerde los pasos que debe seguir. Al final del presente capítulo encontrará, a modo de ejemplo, un sueño interpretado según los pasos del método que propongo y un esquema general por si le resulta de alguna utilidad.

Le ruego encarecidamente que tenga siempre presente los siguientes pasos, imprescindibles para sacar el máximo provecho de los propios sue­ños; debe seguirlos al pie de la letra:

Reserve una hoja aparte para los resúmenes y títulos del mes.Esto no sólo le dará una visión general perfecta del contenido del sueño sino que, además, le acercará a su Yo Superior —que siempre le guía con cariño y amor— y le dejará ver algunos destellos del rumbo que sigue su vida y de los objetivos de su propia alma.

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Categoría: Interpretación de los Sueños.






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