Proceso de amplificación de los sueños
Si todo eso falla, intentemos, con los ojos cerrados, hablar mentalmente con el símbolo. Preguntémosle: «¡Qué estás haciendo en mi sueño? ¡Qué quieres decirme? ¡Qué representas?».
Experimentemos la unión con el símbolo. Por ejemplo, si es un violín, mentalmente podemos convertirnos en el instrumento y luego preguntarnos: «¡Cómo me siento?». ¡Atractivo? ¡Creativo? ¡Alegre? ¡O enfadado, usado, despreciado y agotado? Lo importante es ponernos en contacto con nuestros sentimientos reales, los que ese símbolo representa. Otro método es preguntarse:
- ¡Qué significa para mí?
- ¡Con qué significados lo asocio?
- ¡Cómo me siento por ello?
- Después de cada pregunta, debemos relajarnos y permitir que la mente subconsciente nos hable: hemos de frenar las preguntas que nos vengan a la mente y simplemente sentir. Después escribiremos nuestras impresiones y reflexionaremos sobre ellas para ver si, desde el interior, nos proporcionan una respuesta positiva. Lo importante es ser receptivo a nuevas ideas, posibilidades e impresiones, estar atento y no bloquear la entrada durante el proceso de preguntas.
Si todavía nos sentimos inseguros, podemos probar con un diccionario normal o con un diccionario enciclopédico para significados adicionales. Nos proporcionarán posibles interpretaciones o, como mínimo, sugerencias para intentar encontrar significados que nos resulten útiles.
Habrá ocasiones en que nada nos parecerá adecuado; tendremos que dejar entonces a un lado la parte que no entendemos y continuar meditando sobre su significado a ratos durante todo el día.A menudo, cuando menos lo esperemos, aparecerá la respuesta.
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Categoría: Interpretación de los Sueños.
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