Sexto chakra, chakra Ajna


Ardhanarishvara está en un lingam llamado itara lingam. El lingam es de color blanco brillante, como el color de la luz. La mitad masculina de ardhanarishvara tiene una piel de color azul alcanforado. En la mano derecha sujeta un tridente, que representa los tres aspectos de la conciencia: cognición, conato y afección.El lado femenino de ardhanarishvara es rosado. Lleva un sari rojo y en el cuello y brazos tiene ornamentos dorados brillantes. Sostiene un loto rosa, símbolo de pureza. Toda dualidad ha cesado. Ardhanarishvara se ha convertido en la entidad total, que emana de sí misma y es ilustre.

Sexto chakra, chakra Ajna Los Chakras

Shiva tiene un mando total sobre todos los aspectos del ser en este plano de la liberación, o moksha. El tercer ojo de shiva se llama svanetra, el órgano de la clarividencia. Convirtiéndose en sadashiva, el eterno, shiva ya no está separado de shakti como entidad masculina distinta. Devata shiva es el que concede el conocimiento. Este conocimiento pone el aliento (prana) y la mente bajo el control de ardhanarishvara.

Shakti

Hakini. Hakini shakti tiene cuatro brazos y seis cabezas. Su piel es de color rosa claro y las joyas son doradas y relucen por las gemas. Con un sari rojo, se sienta en un loto rosa con el pie izquierdo levantado. Imparte el conocimiento de la verdad incondicional, la conciencia de la no dualidad. Sostiene en las manos los objetos siguientes:

Efectos de la meditación

El que medita sobre este chakra elimina todos sus pecados o impurezas y entra en la séptima puerta, más allá del chakra ajna. El aura de esta persona se manifiesta de tal modo que permite a todos los que están en su presencia tranquilizarse y ser sensibles a las refinadas frecuencias sonoras de aum; el repiqueteo del aum se genera desde el propio cuerpo de la persona. Ahora es un tattvatita, está más allá de los tattvas. Básicamente todos los deseos son obra de los tattvas, y así cuando uno se establece en el lugar que hay en medio del entrecejo va más allá de todo tipo de deseos que motivan la vida y le impelen a uno a moverse en muchas direcciones.

Ahora se vuelve unidireccional; se ha convertido en un trikaladarsh, conocedor del pasado, el presente y el futuro. Ida y pingala están comprometidos por el tiempo; más arriba del quinto chakra, el yogui también está limitado por el tiempo, pero como ida y pingala terminan aquí el yogui se mueve hasta sushumna, que es kalatita, más allá del tiempo. Termina el peligro de los retrocesos; no hay inversión espiritual, pues mientras esté en su cuerpo físico se halla en estado constante de conciencia no dual. Puede entrar a voluntad en cualquier otro cuerpo. Es capaz de comprender el significado interior del conocimiento cósmico y también es capaz de generar escrituras.

La persona que ha evolucionado a través del chakra ajna revela lo que hay de divino en el interior y refleja la divinidad que hay en el interior de los demás. En el chakra cuarto evoluciona por medio de ananda (gratitud), y en el quinto, por medio de chit (conciencia cósmica). En el chakra ajna se convierte en sat (verdadero). Ya no hay observado ni observador. Llega a la comprensión de que «eso soy yo; yo soy eso» y encarna así el satchitananda, o «serconcienciaéxtasis».

La realización en el quinto chakra es soham («esto soy yo»; de sa, «eso»; aham, «soy yo»). En el sexto chakra, estas sílabas se invierten, conviniéndose así en hamsa. Cuando el yogui medita en el atman, o el ser en el bindu (el «punto» representa la infinidad en la sílaba aum), este ser es conocido como hamsa, que es también una palabra sáncrita que significa «cisne», el ave que puede volar a lugares desconocidos por las gentes ordinarias. El que habita en esta conciencia se llama paramhamsa.

Características de conducta en el chakra ajna

el cuerpo de la glándula pineal penetra en el tercer ventrículo y está rodeado por líquido cerebroespinal. Este líquido acuoso claro fluye desde el chakra soma (el chakra de la luna), que está por encima de ajna. Recorre los espacios huecos (ventrículos) del cerebro y desciende por la médula espinal hasta la base de la columna. La glándula pineal ayuda a regular esta fluencia de un modo equilibrado. Esta glándula responde con mucha sensibilidad a la luz. Cuando una persona entra en el chakra ajna, la luz forma un aura alrededor de su cabeza.

Como en este estado el yogui tiene bajo control la respiración y la mente, mantiene un estado continuo de samadhi (realización de la no dualidad) en todas sus acciones. Lo que desea se vuelve realidad, así como la capacidad de inducir visiones del pasado, el presente y el futuro. Ida (corriente lunar), pingala (corriente solar) y sushumna (corriente central neutral) se reúnen en el chakra ajna. Estos tres «ríos» se encuentran en triveni, la sede principal de la conciencia.

El sexto chakra abarca el plano de la conciencia (viveka), el plano de la neutralidad (sarasvati), plano solar (yamuna) plano lunar (ganga), plano de la austeridad (tapas), plano de la violencia (himsa), plano terreno (prithvi), plano líquido (jala) y el plano de la devoción espiritual (bhakti). El tercer ojo es la conciencia. Los dos ojos físicos ven el pasado y el presente, mientras el tercero revela la percepción del futuro. Todas las experiencias e ideas sólo sirven para clarificar las percepciones del chakra ajna. El plano de la neutralidad (sarasvati) se presenta como un equilibrio entre la energía solar y lunar dentro del cuerpo. Lo negativo y lo positivo, componentes de la dualidad, se igualan en sarasvati, dejando un estado de música pura y neutralidad.

Las energías nerviosas solar (yamuna) y lunar (ganga) se entrelazan en todos los chakras y se reúnen con el sarasvati, haciéndose uno en el chakra ajna. Esto da la sensación de unicidad con las leyes cósmicas que aparecen en el plano de la austeridad. La persona entiende que es un espíritu inmortal en un cuerpo intemporal. El plano líquido lunar enfría cualquier calor excesivo generado por el aumento de los poderes, purificando la conciencia. Bhakti loka, el plano de la devoción espiritual, mantiene un equilibrio apropiado dentro del yogui. En el chakra ajna, el propio yogui se convierte en una manifestación divina. Encarna todos los elementos en su esencia o forma más pura. Todos los cambios interiores y exteriores dejan de ser un problema. La mente alcanza un estado de conciencia cósmica indiferenciada. Cesa toda dualidad.

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Categoría: Los Chakras.






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